— Hablando del famoso Via Crucis Viviente y del tradicional Mercado Medieval, que han dado difusión universal a la villa, ¿Cómo viven los vecinos de Balmaseda estos dos magnos acontecimientos?
El Via Crucis tiene ya casi 150 años de antigüedad. Su primera representación fue en torno a 1886, porque previamente hubo una epidemia de cólera y como rogativa, seguramente, a alguien se le ocurrió idear este tipo de acto de evocación religiosa. Su mayor antecedente parte 20 años atrás (1865) con la fundación de la compañía Farisea de los soldados romanos, que ya iban con la procesión de los pasos de semana santa. Lo que hicieron fue incorporar más personajes dentro de esa procesión.
Es una tradición muy antigua de Balmaseda, de gran calado popular. Su mayor auge se vivió en la década de los 60 (apariciones en tv, cine, prensa nacional y extranjera) bajo la dirección de Roberto Rodet, pintor y alcalde de la villa.
La gente lo sienten y viven desde muy pequeños. Se practican representaciones infantiles en todos los barrios. De tal forma, que cuando son mayores, ya se tienen muy practicados y aprendidos todos los diálogos. Su carácter tan popular y participativo es la base de que haya durado tantos años.
En este sentido, ya he dicho muchas veces que, realmente, Balmaseda para conseguir ser una población tan bien cohesionada, el Via Crucis siempre ha sido fundamental por dos razones:
-1º/ Porque al estar ensayando conoces a más gente y tienes trato. -2º/ Al salir a la calle disfrazado, te hacen fotos y demás, perdiendo el paralizante miedo escénico.
Todo el resto de los eventos populares conocidos (el Mercado Medieval, la quema de la villa por los franceses, los carnavales…), en el fondo, son un poco consecuencia de todo eso.
Por cierto, los tres primeros carnavales de Balmaseda los organicé yo.
Desde 1983, fui presidente de la Asociación de Comerciantes. Por aquella época existía la tradición entre los comerciantes de disfrazarse en martes de carnaval y atender de esta guisa al público.
Recuerdo que el martes de carnaval de 1986, decidimos ir a comer todos juntos -casi 50 personas-.
Lo estábamos pasando tan bien que, después de comer, acordamos no abrir los comercios esa tarde y montarnos la fiesta.
Recorrimos todo el pueblo, entre cánticos de todo tipo y haciendo sonar silbatos. Desde la Plaza de San Severino hasta la de los Fueros, y vuelta a empezar. De esos 50 que en principio estuvimos, al final, nos llegamos a juntar más de 300 personas, disfrazados con cualquier cosa que pillábamos por casa.
A partir de ahí, al año siguiente, la Asociación de Comerciantes y yo como su presidente, nos encargamos de organizar durante 3 años consecutivos los carnavales del pueblo. Los primeros después de la Democracia. Porque, hasta entonces, habían estado prohibidos.






Imágenes retrospectivas de tradiciones populares y festivas de Balmaseda (Via Crucis infantil y adulto, Carnavales, Mercado Medieval…).
— Hablemos un poquito más de ti…Hombre polifacético y, por lo que veo, festivo donde los haya: fotógrafo, realizador de vídeo, escritor, historiador, cronista audiovisual de Enkarterri, gestor cultural… ¿En cuál de estas facetas te sientes más a gusto?
No te voy a negar que la profesionalidad marca. Desde los años 70, empecé a hacer cortos de cine amateur y a participar en otros como: ayudante de sonido, actor, un sinfín de cosas…
En uno que envié en 1982 al Festival Internacional de San Sebastián, hasta me concedieron una Concha de Plata. Por aquel entonces, yo ya tenía mucho callo en todo tipo de realizaciones cinematográficas, vídeos, etc… Porque desde principios de los años 80, también había colaborado con un fotógrafo de Balmaseda realizando infinidad de vídeos. Él compró una cámara y como no sabía manejarla bien me invitó a que yo la probara.
Después, compré mi propia cámara, monté una empresa de edición de vídeos y trabajé con Casa Vasca de Deusto (Bilbao) durante 5 intensos años, grabando multitud de bodas. Igual me hacía más de 100 al año. Era muchísimo trabajo, porque no solo era grabar, sino también montarlos.
Cuando el vídeo empezó a decaer, me refugié profesionalmente en el mundo de la fotografía.
Algunos ejemplos de su trabajo fotográfico
— ¿Cuál es la fotografía que aún no has hecho y te gustaría hacer alguna vez?
No. No soy fetichista. Soy un fotógrafo intuitivo; no suelo preparar las fotos, las veo.
Muchas veces, voy a un hermoso lugar donde todo el mundo está haciendo fotos de todo, y yo, ni siquiera saco la cámara de la bolsa. Antes, tengo que visualizar la foto en mi cabeza. He desarrollado esa capacidad innata de ver la luz. Y en el momento que veo una foto, ya la tengo hecha. Simplemente, regulo la cámara según lo que necesite esa toma concreta, hago la foto y vuelvo guardar la cámara. Ahí, se acabó toda la historia.
Al hilo de las fotografías de bodas, donde la captación del retrato es muy importante, también he hecho fotos book de modelos. De hecho, tengo grandes amigas entre ellos, con las que mantengo un bonito contacto. He disfrutado mucho con este tipo de fotos.
— Con Harresi has publicado tu primera novela, una trilogía titulada “Larga lucha por la libertad”. Háblanos de esta experiencia literaria. ¿Para cuándo algún otro proyecto personal de este tipo?
El tema es que, al publicar los libros, me tocaba también escribir. Al principio, era prácticamente copiar textos de otros, adaptarlos y ponerlos junto a las fotografías.
Al trabajar con Javier Barrio en la Memoria Histórica, nos solían surgir muchas dudas acerca de lo que nos contaban; si era un año u otro…Y empecé a investigar en prensa. A raíz de ahí, surgieron los dos primeros libros que puedo considerar realmente míos: “La toma de Bilbao y Las Encartaciones en la Prensa “(Volúmenes I y II/2016).
A partir de ahí, empecé a tomar conciencia y confianza en escribir. Me surgió un tema interesante sobre el Castillo de Balmaseda, una torre almenada y amurallada del Siglo XIX que ya no existe. Primero, la volaron los liberales en 1836, y luego, los carlistas en el 38. Surgió por casualidad un nexo común y la necesidad de centrarme en investigar ese tema; tuve una especie de «batiburrillo mental» en torno a la figura del máximo benefactor de la villa, Martín Mendía. Investigué sobre su vida, y simultáneamente sobre esa torre, hasta que consideré interesante hacer una novela con la vida de sus abuelos; a los que, por otra parte, tenía totalmente localizados, su genealogía y demás…
Así que, la primera parte de esta novela trata sobre la vida de los abuelos de Martín Mendía. Como se conocieron, se casaron, tuvieron hijos…y todas las demás circunstancias históricas que les iban ocurriendo.
— O sea, que la novela podemos decir que contiene elementos biográficos y de ficción —
Eso es. Al principio, la califiqué de novela histórica, pero en realidad es un libro de historia novelado. Es decir, todo lo que cuenta la novela son hechos documentados; y lo único que voy integrando son personajes reales y alguno imaginario, con el fin de crear una trama. Pero ya te digo, en realidad, es un libro de historia al que he dado forma de novela.
Mientras la primera mitad es una novela costumbrista: como vestían, vivían, lo que comían; las numerosas epidemias que sufrían, la segunda parte se centra en la entrada de los franceses por Irún (1808). Y uno de los hechos claves que se relatan es la quema de Balmaseda por ellos. Decían que iban de camino a Portugal; que España solo iba a ser un país de paso, y ¡mira la que armaron! Al quedarse, la población local empezó a sublevarse.
Un dato que no es muy conocido, es que los franceses no llegaron a ser nunca dueños de este país. Eran dueños de sus cuarteles, y hasta parcialmente de las ciudades. Pero en el reto de las poblaciones pequeñas; en el campo, los montes y en todo eso, nunca tuvieron ningún tipo de dominio.
Se formaron infinidad de partidas de guerrilleros. Y como no tenían fuerza ni organización para atacar a un ejército como el de Napoleón, atacaban pequeños convoyes a modo de guerrillas; es decir, incordiaban como podían. Los franceses, de vez en cuando, capturaban a algunos, los mataban y demás. Tanto en Balmaseda como en el resto de Las Encartaciones, se desarrollaron este tipo de ataques de guerrillas.
De eso, trata en esencia esta novela. Y he integrado a uno de los personajes principales, primero en la guerrilla, y luego en el ejército español.
Tengo otro proyecto literario personal muy avanzado, que yo creo que si realizaré. Se trata de un tema muy conocido de otro balmasedano. Alguien que fue industrial del metal durante la Guerra Civil, y que ayudó a fabricar un tren blindado en los talleres de Balmaseda. Posteriormente, al llegar aquí los nacionales, huyó a Santander. Le cogieron, y en principio, le condenaron a muerte. Al final, le conmutaron la pena por 20 años y le encarcelaron en la cárcel del Carmelo en Santutxu.
Lo curioso del caso, es que este fue el único preso que consiguió escaparse de esa cárcel…


Noticia en prensa (Deia) y Cartel presentación «Larga lucha por la libertad»(2019)
— Viendo vuestro blog y el conjunto de vuestras actividades, me han llamado la atención esas 7 ediciones del Concurso de Cuentos Antonio Trueba, que se confirma como una actividad plenamente consolidada y arraigada en la zona. ¿Qué importancia das a este tipo de concursos en la dinamización de la vida cultural de un pueblo o zona?, ¿Deberían prodigarse más?
Lo mejor que tienen estos concursos es que animan a la gente a escribir. Este es de relatos cortos en euskera y en castellano, con premios para ambas modalidades.
Empezó a celebrarse para conmemorar el 125 Aniversario del fallecimiento de Antonio Trueba.
A pesar de que al principio tuvieron algunos problemas, esta iniciativa que surgió de dos Asociaciones culturales —una de Galdames ( Gurguxa) donde nació Trueba, y la otra de Sopuerta, ( Alen Elkartea)—, continuó hacia adelante.
Cuenta con el apoyo de ambos Ayuntamientos. Esto ha permitido que este proyecto ya se haya consolidado y tenga buen futuro.
La Editorial Harresi ha publicado los siete libros correspondientes a cada una de esas siete ediciones.


Portadas recientes Certamen de cuentos Antonio Trueba (2019 y 2020)
— Harresi se ha convertido en un importante referente en Balmaseda y Zona de Las Encartaciones a nivel publicaciones históricas y estudios etnográficos. ¿Qué radiografía nos harías de este mismo sector en otras zonas de Bizkaia y Euskadi en general?, ¿Es un sector en auge o en declive?
Allá por los años 2013/14 el Gobierno Vasco empezó a subvencionar proyectos de Memoria Histórica -sobre todo, de la Guerra Civil-. Esos años, surgieron muchas Asociaciones, que están trabajando ahora en ese tipo de iniciativas.
Pero desde que hace 5 años el Gobierno Vasco se desligó totalmente de este tema, los que se han ido encargando de estos apoyos, difusión, etc.…, han sido los de Gogora. Que precisamente, se crearon con ese fin en el Pais Vasco. Por lo tanto, gracias a Gogora, podemos decir que este sector está actualmente en auge.
Hay muchas Asociaciones denominadas «Memorialistas», tal como ellos mismos las llaman. De hecho, recuerdo que, en una ocasión, nos reunimos en Gogora y me parece que habría aproximadamente 16 o 17.
Por otra parte, a nivel individual hay muchos historiadores que están trabajando la Memoria Histórica. Desde el mismo Museo de Las Encartaciones, se han hecho intentos de aglutinar todo esto. La propia Harresi creó en su día una web llamada “Encartaciones Memoria”, para centrar todas estas investigaciones de autores individuales.
En Las Encartaciones, que yo sepa, no hay ninguna otra Asociación que se dedique a esto. Y sí personas aisladas, que están haciendo interesantes trabajos de investigación. Pero claro, sin el empuje añadido de de crear una editorial y publicar, todo eso se queda en “agua de borrajas”.
Nuestro objetivo era poder centralizar todo este material; recopilar toda esa valiosa información y darla una utilidad pública, de cara a ayudar al resto de historiadores.
Al final, no pudo ser. Ya sabes, la clásica lucha de egos y el egoísmo individual…Tristemente, no se suele pensar en el beneficio general de la Cultura y la sociedad.

Con un grupo de historiadores en el Museo de Las Encartaciones
(Congreso Guerra Civil 2018)
—Hoy en día, parece que asistimos a un fuerte boom del e-book o libro digital. Me ha llamado la atención el lema que aparece junto a vuestro logotipo: “Comunicar vuestro saber es el mejor legado que se puede dejar a las generaciones venideras. Los libros contienen el conocimiento humano”.
A nivel personal, ¿es Pikizu un defensor del soporte del libro físico tradicional?,¿Cuál es el libro que actualmente tienes en tu mesita de noche?
Pues mira, esa frase se me ocurrió sin más. Tenia que adornar el logotipo y me salió así.
El libro tradicional todavía tiene -y seguirá teniendo- mucha fuerza. Por lo que puedo hablar y ver en las promociones de libros, la gente sigue prefiriendo el papel. Es más cómodo el e-book, y te permite guardar miles de libros. Pero no acaba de cuajar del todo.
Precisamente sobre esto, he oído hoy una frase en la radio muy curiosa: “Ahora, que hemos estado confinados y hemos tenido mucho tiempo para leer, el que ya leía ha leído mucho; y el que no leía no ha cogido un libro”.
—Le comento que comparto ese amor por el libro tradicional. Su olor, su tacto, el sonido al pasar cada página…—
Sí, sí, eso va a seguir…De hecho, en la Editorial Harresi lo vemos y por eso todas nuestras publicaciones son en papel. No soy partidario de publicar en digital.
Mientras sigamos teniendo un público fiel, que se acercan a la librería y los leen; y los compran, y los comentan y demás…, pues seguiremos haciendo cosas.
—En estos 10 años, habrán sido muchas las visitas a vuestro blog y a vuestra web…—
Realmente, la primera página que se hizo: Harresi.org, sigue todavía vigente, pues tiene muchos artículos interesantes. Y ahora mismo, está por las 950.000 visitas.
La nueva página que acabamos de crear, no solo tiene el catálogo online con esos 43 libros que hemos ya publicado y puesto a la venta, cuenta también con un blog en el que vamos publicando noticias interesantes, como esa del balmasedano en Nueva York. En un mes, ha tenido ya 2.500 visitas.
En mi mesita de noche, no tengo ahora ningún libro. Me encantaría, pero no puedo dedicarme a leer todo el tiempo que quisiera. Ahora, tengo también otros hobbies. Me gusta mucho tocar la guitarra eléctrica; y ahí estoy, estudiando y tocando a mi aire. Realmente, todo lo que he hecho en mi vida ha sido de forma autodidacta.


Varios momentos de la reciente presentación «Mujeres de Balmaseda. Siglo XX» (marzo 2021)
Arriba izq., discurso del Alcalde, Aitor Larrinaga. Abajo izq. introducción de Pikizu. Al fondo, la autora Aintzane Eguiluz Romero. Abajo Dcha, público asistente (aforo máximo 30 personas), entre los que estuvimos varios representantes de encontrarte
— Próximamente, con motivo del Dia Internacional de la Mujer, presentaréis en el Palacio Horcasitas un libro sobre el papel de la mujer en Balmaseda. Háblanos de este proyecto, hoy hecho realidad.
Hace 15 años, una escritora de Portugalete, Aintzane Eguiluz Romero, consiguió una subvención para hacer unas investigaciones en el Archivo de Balmaseda. A raíz de este encargo, dedicó otros cuatro años a estudiar el papel de la mujer, documentándose en el Archivo Municipal y completando este estudio con el importante testimonio vital de unas 30/40 mujeres de la villa.
En ese momento, esa información se quedó ahí en el Archivo, hasta que el año pasado me la pasaron. Lo leí, me pareció interesantísima como para editar un libro y contacté inmediatamente con la autora.
El estudio abarcaba los siglos XVI al XX, pero, al final, decidimos que sería mejor centrarnos solo en el Siglo XX. Por cercanía o por ser más conocido para la gente actual.
La presentación, a la que, por supuesto, todos los/as amigos/as de encontrarte estáis invitados/as, será el jueves 11 de marzo a las 19:00h, con el aforo reducido a un máximo de 30 personas.

Después de casi hora y media, entre risas, anécdotas, datos históricos…llegamos al final.
Mi interlocutor, al principio, decía tener miedo ; que no le gustaban las entrevistas. Pues, ¡menos mal!, porque yo le he visto muy suelto. Tanto que, incluso, considera que nos hemos dejado temas interesantes en el tintero: jugoso contenido, del que podríamos estar hablando perfectamente 3 o 4 días más. ¿Quién sabe si en un futuro continuaremos?…Ahora, por la salud de nuestros lectores, no es cuestión de escribir otro Quijote…jejeje
Os confieso, que me ha resultado todo un placer charlar, descubrir…la afable personalidad de este hombre de pequeña estatura pero de gran corazón. De medidas palabras, autosuficiente, autodidacta —como a él le gusta definirse—. Alma fundadora y promotora de Harresi. Su observadora y atenta mirada vigila la Memoria Histórica; el ayer y el hoy de Las Encartaciones. Su gran sentido solidario con sus vecinos/as, queda patente en cada una de sus respuestas, en las numerosas acciones altruistas y humanitarias de su dilatado trayecto.
Con nosotros, el colectivo encontrarte, sus esfuerzos y apoyos no solo quedarán condensados en nuestro atractivo catálogo; seguro que vendrán nuevos proyectos y prometedoras colaboraciones…
Tras su frondosa barba y pelo cano, al otro lado de sus gafas y de su cauta sonrisa, se esconde todo un humilde ermitaño. Un polifacético hombre renacentista o una especie de Leonardo Da Vinci de nuestro tiempo, que viaja con misión salvadora buscando las huellas del pasado...
Amante de su inseparable cámara fotográfica y del protector silencio de esa paradisiaca naturaleza que rodea a su casa de Peñacerrada. Hoy, ha vuelto a recordarme esa putxera que allí tenemos todavía pendiente entre amigos/as. Hace tiempo, ya me invitó y no pude asistir. Espero que ,en esta ocasión, su timidez se rinda y pueda deleitarnos con algunos mágicos acordes de su querida guitarra.
Mientras tanto, tomo —tomamos— buena nota de esa invitación del día 11 en el Palacio Horcasitas. Al igual que su balmasedano de “altas alturas” al que con tanta pasión se refería, ese libro sobre el papel de la mujeres de Balmaseda seguro que dará también mucho de hablar…
¡¡Larga vida a HARRESI!! y ¡¡FUERTE ABRAZO!! para ti, compañero.
Ángel MOMOITIO GARCÍA
(Directiva Encontrarte )
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